Luego de poco más de dos años de espera, el techo de la cocina será reconstruido, reutilizando más del 70% de los materiales originales salvaguardados oportunamente por el Museo. En tanto,el techo del fregadero será desmontado y construido nuevamente, las técnicas y elementos originales.
El 8 de Mayo de 2018, poco después de las seis de la tarde y tras una semana de intensas lluvias, el techo de la Cocina Histórica de la Estancia de Jesús María se derrumbó en un 70%, en una sala que, por decisión del personal del Museo, se encontraba cerrada al público.
Hacía ya 7 meses que el Museo Jesuítico Nacional se encontraba sin Director, tras la jubilación de Nelso Lenarduzzi. El Ministerio de Cultura estaba a punto de disolverse para ser Secretaría y aún no habia una definición sobre el Concurso para la Dirección de la Institución. La Institución se encontraba a cargo de su propio personal.
La mañana previa al derrumbe se había tomado la decisión de cerrar la Cocina Histórica, debido al estado de diversas grietas que ya habían sido informadas y documentadas formalmente desde nuestra Institución a las autoridades correspondientes, en múltiples ocasiones a lo largo de varios años, sin que nunca tomaran las medidas correspondientes para proteger un Monumento Histórico Nacional, Patrimonio de la Humanidad UNESCO 2000, Sitio de Memoria de la Ruta del Esclavo UNESCO 2013 y, sin dudas, uno de los edificios más antiguos de nuestro país (1618)
El personal del Museo acudió a los pocos minutos del hecho para comenzar con las tareas de salvaguarda de los materiales edilicios resultantes del derrumbe parcial del techo de la cocina y para el traslado a las Áreas de Rerseva de los bienes museológicos que se encontraban exhibidos en el lugar, trabajando junto a especialistas en estructuras de la Dirección Nacional de Museos y de la Municipalidad de Jesús María, quienes e hicieron presentes esa misma noche, con conocimiento de la Comisión Nacional de Monumentos, de Bienes y de Lugares Históricos, y la Dirección de Patrimonio Cultural de la Agencia Córdoba Cultura del Gobierno de la Provincia de Córdoba.
La situación impactó profundamente a nuestra comunidad, quedando demostrado que antes de ser "patrimonio mundial", la Estancia es patrimonio de vecinos y vecinas, quienes brindaron muestras de apoyo de todo tipo a lo largo de los días posteriores al derrumbe, que implicaron un arduo trabajo.
En los meses siguientes, el Concurso de Director del Museo finalmente tuvo su resultado, nombrándose al Mgtr. Carlos Ferreyra Bertone como director de la Estancia de Jesús María - Museo Jesuítico Nacional, quien desde la asunción a su cargo en agosto de 2018, puso todo su empeño en completar las tramitaciones pertinentes para lograr el llamado a licitación para la restauración de los dos techos más antiguos de la Estancia Jesuítica de Jesús María.
Por tratarse de un bien que es Patrimonio Mundial y Monumento Histórico Nacional, requirió innumerables estudios, propuestas de intervención e investigaciones por parte de un gran equipo, tanto del personal del Museo, como de profesionales que se sumaron. El equipo estuvo encabezado por al arquitecto patrimonialista Antonio Sabatté y por el ingeniero estructural José Luis Gómez, en tanto que participaron el personal de las Área de Registro y de Mantenimiento en todas las tareas operativas llevadas a cabo.
Los dos techos incluídos en esta licitación son los de la antigua cocina, que se se derrumbó aquel 8 de mayo de 2018 yel techo del Fregadero, que está en una situación muy comprometida, por eso en el llamado a licitación se incluyeron ambos.
El techo de la cocina será reconstruido reutilizando más del 70% de los materiales originales salvaguardados oportunamente por el Museo. en tanto que el techo del fregadero será desmontado y construido nuevamente, utilizando en todos los casos, las técnicas y elementos originales.
A partir del proceso licitatorio quedó seleccionada la empresa GUCCONS S.A. teniendo un plazo de 120 días para su finalización y un monto de obra de 4.000.000 de pesos.
La idea de esta dirección y de las autoridades superiores es que la obra esté finalizada para los festejos de diciembre, cuando se cumplen 20 años de la declaración del conjunto jesuítico de Córdoba, como patrimonio mundial por la UNESCO.
